Muchos gatos beben poco. Incluir comida húmeda a diario aporta agua, mejora la palatabilidad y ayuda a cuidar el tracto urinario y el peso. Te cuento lo esencial y cómo aplicarlo en casa.
Puntos clave:
- Hidratación fácil: la comida húmeda suele tener ≥75% de agua, por lo que es una fuente directa de líquidos para gatos que beben poco.
- Tracto urinario más protegido: más agua = orina más diluida y mayor frecuencia de micción, lo que puede reducir cristalizaciones y problemas urinarios.
- Calorías por volumen más bajas: al tener tanta agua, aporta menos kcal por ración y puede ayudar en control de peso.
- Alta palatabilidad y variedad: suele ser más apetecible para comedores exigentes, útil para mantener ingestas constantes.
Cómo aplicarlo en casa:
Meta diaria mixta: combina seco + húmedo o pasa a húmedo completo según recomendación veterinaria. Empieza con 25–50% húmedo.
Preguntas rápidas:
- ¿Cuánta agua necesita un gato? Aproximadamente 120 ml por cada 2,3 kg de peso magro/día; con húmedo beberá menos del cuenco porque ya la ingiere en la comida.
- ¿Sirve para gatos con sobrepeso o diabéticos? Puede ayudar por su menor densidad calórica y mayor proteína/bajo carbohidrato en muchas fórmulas; confirma con tu veterinario.
- ¿Todo húmedo o mixto? Ambas estrategias son válidas; lo importante es cubrir nutrientes y mantener hidratación adecuada.